Blogia
TIEMPOS NUEVOS

Cuando dices adiós es para siempre

No importa cuanto te alejes de mí, el mundo es redondo y tarde o temprano me volverás a encontrar, pero ya no seré el mismo. Yo no te guardaré rencor y no habrá de que arrepentirse. Yo entendí que no eras para mí y eso es lo mismo decir que yo no te merecía, no se trata de buscar culpables ni pensar en lo que pudo ser. Las despedidas son siempre tristes porque solemos recordar siempre los momentos y acciones felices; sorprendidos lloramos al darnos cuenta que fue un pequeño e insignificane detalle que nos hirió el orgullo y nos alejó, sentimentalmente, para siempre. Siempre te querré porque en mi menoria aparecerás eternamente como eras en los días felicies que nos tocó vivir... adiós para siempre.

0 comentarios